Con la nueva ola de calor que se aproxima junto con el verano, es muy fácil dejarse tentar y optar por comprar gaseosas, familiares o personales, para calmar la sed. Pero ¿realmente hidratan? Y, además ¿son saludables?

Las gaseosas tienen un alto contenido de azúcar, y podemos identificar este rasgo, fácilmente, por los octógonos que la mayoría lleva al frente, sobre su etiqueta. En ese sentido, su consumo excesivo no se recomienda, porque el alto consumo de azúcar puede traer problemas en la salud, como obesidad, diabetes, entre otras. Pero este no es el único problema que trae el consumo de bebidas gaseosas. Aquí hablaremos más respecto a ellas, su consumo, y los ingredientes que poseen y afectan la salud.

Las gaseosas no calman la sed

Lo más común es comprar gaseosas pensando que quitarán la sed; después de todo, es “agua”. No obstante, esto no es así, ya que, debido a la cantidad de azúcar que contienen, lo que hacen estas bebidas es aumentar la sed de las personas que las toman.

¿Quieres calmar la sed? Razones para no tomar gaseosas

Se debe evitar el consumo regular de gaseosas porque no aportan valores nutricionales, por el contrario, contienen ingredientes que pueden afectar la salud. Estas son otras razones por las que debemos evitar o reducir su consumo:

• Al tomar un vaso de gaseosa estás consumiendo, aproximadamente seis cucharaditas de azúcar en un vaso de 250 mililitros.
• Las gaseosas contienen cafeína, esta actúa como un diurético en los seres humanos, lo que en consecuencia provoca que se pierda más agua.
• Según ESSALUD el consumo excesivo de gaseosas puede ocasionar deshidratación severa y la pérdida de muchos electrolitos en un día.
• Las gaseosas tienen más calorías que los refrescos preparados en casa, como chicha, emoliente, limonadas, etc. Por ende, su consumo excesivo puede fomentar la obesidad.
• Algunas gaseosas tienen aditivos que son dañinos para el organismo, por ejemplo, el benzoato de sodio que ocasiona que el cuerpo no pueda absorber el potasio.
• Los altos niveles de ácido fosfórico, de las gaseosas, pueden ocasionar pérdida de calcio, así como cálculos renales.

¿Cómo calmar la sed y evitar la deshidratación en el verano?

La mejor forma de calmar la sed, tanto en el verano como en cualquier época del año, es con el consumo de agua sola. Un consumo de entre 6 a 8 vasos de agua al día, puede aplacar la sed de niños y adultos; aunque la cantidad de líquido que se necesite puede ser mayor si se practica alguna actividad física.

También ayuda a hidratar el cuerpo el comer frutas y verduras; ya que estas contienen un gran porcentaje de agua en su composición. Se recomienda el consumo de frutas como naranjas, sandía, melón, papaya, entre otras; así como verduras como la lechuga, pepino, tomates, etc.

Es bueno también optar por refrescos caseros, frente a la compra de gaseosas. Respecto a aquellos, es preferible que no contengan azúcar añadida o en muy pocas proporciones. La miel de abeja, la algarrobina y la chancaca contienen azúcar, modera su consumo. Ahora que sabes que las gaseosas no calman la sed y más bien la incrementan, esperamos que puedas compartir esta importante información en tus redes sociales.

Fuentes:

• https://web.ins.gob.pe/es/prensa/noticia/gaseosas-no-calman-la-sed-y-mas-bien-la-incrementan-por-el-azucar
• https://www.essalud.gob.pe/gaseosas-deshidratan/